Hoy escribo la primera entrada del blog tras la declaración del estado de alarma para luchar contra el covid19. Llevamos tan sólo 48 horas en casa, y más de uno ya quiere tirarse por la ventana...
Es normal. No estamos preparados para ésto. Nadie nos preparó. No era posible imaginar algo así.
Pero por otra parte, en nuestro blog siempre hablamos de prepararnos para un entorno de cambio constante, completamente imprevisible. Hablamos de entornos VUCA, como espacios de incertidumbre, en el que todo cambia con rapidez, de manera profunda, como entornos en los que vimos que nos iba a tocar desarrollar nuestra carrera profesional, y que eso exige cambiar el chip interno, para adaptarnos a la nueva situación. Pero una cosa es hablar de algo y otra cosa es vivirlo en primera persona...
Pues bien, nos ha tocado vivirlo de golpe y porrazo. Y sin aviso previo. Esta crisis del covid19 nos ha supuesto entrar en el entorno VUCA a lo bestia...como si alguien nos hubiera empujado a una piscina sin pensar siquiera que nos íbamos a dar un baño. Sin tiempo de preparación suficiente. En absoluto.
Es un cambio de escenario brutal. De un día para otro. Y nadie está preparado para esto. Por eso es momento de aclimatar...
Y de ir haciendo lo que se puede, tomando decisiones sobre la marcha. Tratando de hacerlo lo mejor posible, pero sin ningún tipo de certeza sobre cómo vamos a tener que hacer las cosas mañana.
Esta mañana, pensaba haber empezado a trabajar online para continúar con mis clases en lo posible, pero como hemos visto en los entornos VUCA, nada es previsible, y ha sido momento de acudir a colaborar en lo posible para ayudar a la batalla que estamos librando...
Y después, de vuelta a casa, he pensado que no hay ninguna prisa por obsesionarse con trabajar con nuestras clases, como si nos fuera la vida en ello. Es momento de respirar, de empezar a digerir esto, de no obsesionarnos con seguir la vida como si nada hubiera pasado, porque sí ha pasado, está pasando, y probablemente la crisis va a durar bastante más de lo que inicialmente podíamos pensar.
Por ello he pensado, que es mejor ir aclimatando a un entorno inestable, imprevisible, de incertidumbre extrema, en el que hay que recolocar estrategias cada día, y que pretendo eso sí, en la medida de lo posible, hacer lo más compatible con una "cierta" normalidad. Y digo "cierta", porque hemos tenido que reinventarnos en 24 horas, y tenemos que seguir reinventándonos con lo que vaya sucediendo a continuación en cada momento.
Así que creo que es hora de aclimatar...
Pues creo tienes toda la razón creo que para algunos nos toma mas tiempo el aclimatarnos que a otros., sobre todo a estar en casa y no poder salir, tratar de distraerte y pensar e inventarte que hacer y no poder concentrarte y tener que dar ánimo a los tuyos cuando tu eres la primera que lo necesita, para mi que siempre me gusta estar activa pero hacer cosas fuera de casa, esto me supera un poco. Creo también que cada día trae lo suyo y poco a poco nos iremos acostumbrando, poner al día cosas que teníamos pendientes, estudiar un poco mas relajado y lo mas ¡¡Importante!! disfrutar y valorar nuestra familia, el poder charlar, reir hacer juegos y escuchar, que con el ajetreo del día no lo hacíamos, pues ahora es el tiempo.
ResponderEliminarUn saludo a todos que esteis bien, y a cumplir las normas, para que esto termine pronto.